Como curiosidad, destacar que, de aquella época, se sabe que una entrada costaba 60 céntimos de peseta, que los menores de catorce años y las mujeres pagaban la mitad, y que el precio de tribuna ascendía a 12,5 pesetas. Zendrera fue también la responsable de los nombres en español de algunos personajes, como Hernández y Fernández (en el original, Dupond y Dupont) o Silvestre Tornasol (Tryphon Tournesol en el original).