El ganador y por tanto campeón intercontinental de esa edición fue el AC Milan con un resultado y juego ampliamente superior con todas sus estrellas al equipo franjeado, con un 3-0 contundente sobre Olimpia. En ese mismo año, el «Decano» al haberse alzado con el título de «Campeón de América» nuevamente al conseguir ganar por 2° vez en su historia la Copa Libertadores de América bajo la dirección técnica del uruguayo Luis Alberto Cubilla, se ganó el derecho de disputar la Copa Intercontinental en el Estadio Nacional de Tokio, Japón de 1990 con el AC Milan italiano, equipo campeón de la Liga de Campeones de la UEFA 1989-90, conducido por el entrenador italiano Arrigo Sacchi.